En los últimos años los morteros y estucos de cal se han popularizado gracias al impulso de la bioconstrucción. Sin embargo, este tipo materiales tiene una larga tradición en el sector, avalada por sus buenos resultados, su versatilidad y su estupendo equilibrio entre calidad y precio.
Si todavía te estás cuestionando la viabilidad de emplear este material en tu próximo proyecto, en este post te ofrecemos una interesante lista de razonas por las que vale la pena planteárselo.
¿Qué es el mortero de cal y para qué se utiliza?
Cal aérea o hidráulica, áridos y aditivos naturales son la base de composición del mortero de cal, el sustituto perfecto del popular mortero de cemento. Éste es un material que se ha utilizado de manera tradicional en las construcciones y que con posterioridad fue relegado a un segundo plano tras la proliferación del cemento. Ahora que la bioconstrucción y la conciencia ecológica se han impuesto no tanto como una moda sino como una necesidad, el mortero de cal vuelve a estar en auge y su uso está cada vez más extendido. Si bien inicialmente se empleaba sobre todo en trabajos de restauración, por ser mucho más natural y menos agresivo con los materiales de base, en la actualidad la cal se utiliza en muchos otros ámbitos de la construcción:
- Mamposterías antiguas y recuperación de muros y rejuntados
- Revoques tradicionales con acabado rugoso, fratasado, brillante…
- Protección de muros en ambientes de mucha humedad y salinidad
- Saneamiento de paredes o juntas
- Bóvedas y pavimentos
Ventajas de los morteros de cal
A pesar de que su uso está muy extendido, es importante aclarar que los morteros de cemento no siempre son la solución ideal. A la hora de poner en marcha un proyecto de construcción y de seleccionar los materiales para la obra hay que tener muy en cuenta sus características particulares. El cemento puede resultar útil en diversas circunstancias, pero no hay que olvidar que este material experimenta una gran retracción derivada de la pérdida de agua tanto durante el fraguado como tras el endurecimiento. Éste es el motivo por el que con frecuencia aparecen grietas y fisuras en las superficies tratadas con cemento. Esto no te ocurrirá con la cal, que además de ésta presenta otras muchas ventajas interesantes:
- La cal es un material biodegradable. La cocción del mortero de cal se realiza a temperaturas muy bajas y además no se incluye ningún elemento que no esté ya presente en la naturaleza, por lo que resulta un producto ecológico.
- El coeficiente de dilatación de este material es asombroso. La cal es capaz de estirarse o encogerse para amoldarse a diferentes soportes gracias también a su alto nivel de plasticidad. Precisamente por este motivo se suele emplear con frecuencia en la ornamentación de muros, tanto de interior como de exterior.
- Es un material transpirable. Los muros sobre los que la apliques no se verán ‘asfixiados’, algo muy importante para garantizar su resistencia y durabilidad. La cal absorbe o arroja el agua facilitando el intercambio higrométrico y evitando que la humedad se dispare.
- Debido a su alto nivel de alcalinidad, la cal actúa como fungicida y desinfectante natural previniendo la formación de manchas de moho, la proliferación de hongos o la aparición de esporas potencialmente perjudiciales para la salud.
- ¿Sabías que puedes retirar este material sin afectar al resto de la construcción? Los morteros de cal están considerados materiales reversibles: puedes retirarlos cuando quieras y sustituirlos por otro material o por un nuevo revoco, enlucido o estuco de cal. Esta propiedad resulta especialmente interesante en la restauración de inmuebles antiguos en los que no quieres que se vean dañados los materiales de base.
- Su resistencia frente a los fenómenos atmosféricos adversos está más que probada. Con la cal no tendrás problemas con la humedad, la lluvia, la condensación o las aguas torrenciales. Su contenido en sílice le aporta ese carácter de obra perenne.
- Es la opción más segura. Tanto por su composición natural como por su respuesta en situaciones adversas como la presencia de fuego, frente al que ofrece una excelente protección sin apenas cambios en su morfología.
- Proporciona acabados muy estéticos y atractivos. Los morteros de cal son un material fácilmente manipulable con el que puedes obtener efectos de diseño mucho más llamativos sin que ello merme la resistencia de la construcción.
- ¿Estás trabajando en la obra de una vivienda o de una nueva estancia? Apuesta por el mortero de cal. Ofrece un aislamiento excepcional frente al ruido y los cambios de temperatura, por lo que favorecerá a la creación de espacios más confortables y eficientes de desde el punto de vista energético.
Amplía los usos de los materiales que empleas en tus trabajos de construcción y aprovéchate de la versatilidad de los morteros de cal. Puedes emplearlos en infinidad de proyectos y obtener unos resultados siempre excelentes al mismo tiempo que haces tu pequeña aportación a un planeta sostenible y a una forma de construcción mucho más ecológica